El Gobierno de México ha tenido avances significativos en materia de seguridad durante esta administración.  La tasa de homicidios por cada 100 mil habitantes ha bajado considerablemente. En 2012, al iniciar esta administración, era de 22; ésta se redujo a 19 en 2013, y se estima que la de 2014 será de 17. Esto coloca al país en niveles inferiores de los que se tenían en 2009 y con tasas menores a las que registran otros países latinoamericanos. Asimismo, durante estos últimos dos años, el robo se ha reducido en un 13.6%, y la extorsión en un 29.5%, con respecto a 2013.

En suma, entre 2012 y 2014 la incidencia delictiva total, que se refiere a todos los delitos en su conjunto, se redujo en un 7%, arrojando la segunda tasa más baja por cada 100 mil habitantes desde 1997.