Cartas del Embajador
"GANDOLFO"
Alberto Barranco Chavarría
En lo que fuera una villa romana donde el emperador Domiciano construyera un palacio entre los años 81 y 96, utilizado como sitio de reposo y veraneo de los papas a partir de Urbano VIII, en el siglo VII. Años después, en mil 200, la familia Gandolfo de origen genovés erigiría un castillo cuya propiedad se integraría a los Estados Pontificios. Al esplendor le agregaría el papa Pio XI un palacio más en cuyo conjunto se unía una construcción en forma de chalet. La unidad, rodeada de jardines y fuentes, quedaría en el abandono de 1870 en que se unifica Italia, hasta 1929 en que se firman los Tratados Lateranenses, en cuyo marco de crea el Estado del Vaticano y se restauran propiedades a la iglesia. Desde ahí la tradición de sitio veraniego de los pontífices se mantuvo viva...hasta el actual, Francisco, quien decidió no acudir a la cita anual. El poblado de 8 mil habitantes, a los pies del lago Albano se ubica a 40 minutos de Roma. Ahí está la historia de los papas, ornamentos, retratos, automóviles...El entorno lo rodea la granja del Vaticano y un Observatorio Astronómico. Casi el paraíso.