28 años de relaciones diplomáticas entre México y la Santa Sede
El 21 de septiembre se realizó un evento para conmemorar el 28º aniversario del restablecimiento oficial de relaciones diplomáticas entre México y la Santa Sede (1992). Éste se llevó a cabo tanto de forma presencial –en la residencia oficial de la Embajada de México ante la Santa Sede– como en formato digital, vía la plataforma Zoom. En dicha actividad el embajador de México en el Vaticano, Alberto Barranco Chavarría, pasó revista a los momentos más emblemáticos de las últimas tres décadas de relación bilateral.
En sus palabras el embajador Barranco enfatizó la importancia que para México significa el fenómeno guadalupano, como punto crucial del sincretismo y fusión de dos culturas. Destacó –al lado de la tumba del apóstol san Pedro en los sótanos de la Basílica Papal, sitio que puede ser considerado como uno de los lugares de mayor relevancia para el mundo cristiano– la capilla dedicada a la virgen de Guadalupe, diseñada por el arquitecto mexicano Pedro Ramírez Vázquez y obsequiada al Vaticano en la víspera del restablecimiento de relaciones diplomáticas. Dicha capilla (la única en su tipo al lado de la tumba del primer papa) fue inaugurada en mayo de 1992 en una eucaristía celebrada por el entonces papa san Juan Pablo II y por el entonces arzobispo primado de México, el cardenal Ernesto Corripio Ahumada.
Por otro lado, en el mensaje se hizo hincapié en que México, en su calidad de Estado laico y con el respeto a la libertad de culto existente, reconoce el liderazgo espiritual del papa Francisco. Se enfatizó que nuestro país coincide plenamente con las posiciones del santo padre a favor de la gente pobre, la justicia social, el respeto a las poblaciones migrantes, el cuidado de la casa común, el trabajo digno y justamente remunerado, la protección de la niñez y de las personas de la tercera edad, la trasparencia y el combate a la corrupción. Asimismo, se reconoció públicamente la ayuda solidaria del obispo de Roma hacia México, mediante la entrega de insumos sanitarios y a través de sus palabras de aliento y cercanía. Por último, se subrayó que la solidaridad será la palabra clave que definirá el mundo pospandemia para todos los países.
En la ceremonia se contó con la presencia de altos funcionarios vaticanos:
- monseñor Paul Richard Gallagher, secretario para las relaciones con los Estados (figura equivalente a la de canciller);
- cardenal Beniamino Stella, prefecto de la Congregación para el Clero;
- monseñor Joseph Murphy, jefe de protocolo de la Santa Sede; y
- monseñor Jorge Carlos Patrón Wong, secretario para los seminarios de la Congregación para el Clero y el mexicano en activo de mayor rango en la curia romana.
Asimismo, asistió un importante número de clérigos. Destacó la presencia de los prefectos de los pontificios colegios mexicano, latinoamericano y portugués (en los cuales se hospedan los sacerdotes que realizan estudios superiores en Roma); los rectores de la Pontifica Universidad Antoniana y la Universidad Europea de Roma (ambos mexicanos); los superiores generales de los Legionarios de Cristo y de los Padres Maristas de las Escuelas (mexicano) y miembros de las demás congregaciones religiosas con presencia de mexicanos en Roma.
Por su parte, vía Zoom participaron más de cien personas, quienes siguieron con detenimiento el referido acto.
