“La Semana de México en Porto 2016”, actividad multidisciplinaria nº 8 del Programa de Promoción Cultural 2016, celebrada del 11 al 20 de mayo, en la Fundación Manuel Antonio da Mota, presentó a lo largo de 10 días, una veintena de actividades de promoción económica y cultural en los ámbitos de las artes visuales, artes escénicas con un programa de conciertos de música de corte clásico, tradicional, regional; cine clásico y contemporáneo; una amplia propuesta de fomento de la gastronomía mexicana bajo el lema “Ven a Comer”; y la promoción de México como uno de los destinos turísticos preferidos por el público portugués.

Esta iniciativa contó asimismo con actividades en el ámbito del deporte con la presencia de tres jugadores mexicanos que militan en el Club de futbol de Porto, un programa para la promoción de la literatura mexicana y un segmento dedicado a la moda con un desfile de diseños inspirados en la pintura y el arte mexicano.

El sábado 14 de mayo se presentó al público de Porto el desfile de moda "Resignificación de Frida Kahlo" integrado por 30 propuestas de la diseñadora mexicana Nélyda Acosta inspiradas en la obra de la artista Frida Kahlo.

Esta actividad se llevó a cabo en el espacio abierto del Mercado Bom Sucesso, sede de la Fundación Manuel Antonio da Mota y contó con la participación del Dr. Rui Pedroto, Presidente de la Comisión Ejecutiva de la Fundación Manuel Antonio da Mota; el Dr. Bernardo Carnall, Gerente de Sustentabilidad y Relaciones Institucionales de Mota-Engil México; el Arq. Joaquim Coelho Lima, Cónsul Honorario de México en Porto y del Embajador de México en Portugal Alfredo Pérez Bravo y un público conformado por más de 600 personas.

Nélyda Acosta, surge como diseñadora con la idea de generar una propuesta original, vinculada a los valores culturales de México, evitar seguir la tenencia del diseño y el gusto en el vestir de los dictados de la moda en otros países; así como también a una inquietud latente de expresar su conocimiento de la artesanía y el arte popular mexicano. La consecuencia de ello la llevo a buscar espacios para que la artesanía diera ese salto, del mercado al museo, y de éste a los aparadores de las mejores tiendas; sin  pretender la imitación, bajo la justificación de utilizar mejores hilos, telas o concepciones, pues los artesanos tienen siglos haciéndolo, expresa la propia artista.

Cabe destacar la exitosa presentación de esta iniciativa que resultó de un enorme atractivo para el público local que agotó la disponibilidad de los espacios y requirió de una importante preparación y producción técnica –coreografía, iluminación, música, maquillaje- y la participación de 10 modelos profesionales así como de la propia diseñadora mexicana.